Los manifestantes participan en una manifestación contra los recortes previstos por el gobierno alemán en los incentivos a la energía solar, en Berlín el 5 de marzo de 2012. REUTERS/Tobias Schwarz
BERLÍN, 28 oct (Reuters) – Alemania ha solicitado ayuda a Bruselas para reactivar su industria de paneles solares y mejorar la seguridad energética del bloque mientras Berlín, tambaleándose por las consecuencias de la excesiva dependencia del combustible ruso, se esfuerza por reducir su dependencia de la tecnología china.
También está reaccionando a una nueva ley estadounidense que ha generado preocupación de que los restos de la anteriormente dominante industria solar de Alemania puedan trasladarse a Estados Unidos.
La fabricación solar de Alemania, que alguna vez fue líder mundial en capacidad instalada de energía solar, colapsó después de que una decisión del gobierno hace una década de recortar los subsidios a la industria más rápido de lo esperado llevó a muchas empresas solares a abandonar Alemania o a la insolvencia.
Cerca de la ciudad oriental de Chemnitz, en el llamado Valle Solar de Sajonia, Heckert Solar es uno de media docena de supervivientes rodeados de fábricas abandonadas que el director regional de ventas de la empresa, Andreas Rauner, describió como “ruinas de inversión”.
Dijo que la compañía, ahora el mayor fabricante de módulos o paneles solares de Alemania, logró capear el impacto de la competencia china subsidiada por el estado y la pérdida del respaldo del gobierno alemán a través de la inversión privada y una base de clientes diversificada.
En 2012, el entonces gobierno conservador de Alemania recortó los subsidios solares en respuesta a las demandas de la industria tradicional cuya preferencia por los combustibles fósiles, especialmente las importaciones baratas de gas ruso, ha quedado expuesta por la interrupción del suministro tras la guerra de Ucrania.
“Estamos viendo lo fatal que es cuando el suministro de energía depende completamente de otros actores.Es una cuestión de seguridad nacional”, dijo a Reuters Wolfram Guenther, ministro de Energía del estado de Sajonia.
Mientras Alemania y el resto de Europa buscan fuentes alternativas de energía, en parte para compensar la falta de suministros rusos y en parte para cumplir los objetivos climáticos, ha aumentado el interés en reconstruir una industria que en 2007 produjo una de cada cuatro células solares en todo el mundo.
En 2021, Europa contribuyó solo con el 3% de la producción mundial de módulos fotovoltaicos, mientras que Asia representó el 93%, del cual China produjo el 70%, según un informe del instituto Fraunhofer de Alemania en septiembre.
La producción de China también es entre un 10% y un 20% más barata que la de Europa, según muestran datos separados del Consejo Europeo de Fabricación Solar (ESMC).
ESTADOS UNIDOS TAMBIÉN UN RIVAL ENERGÉTICO
La nueva competencia de Estados Unidos ha aumentado los pedidos de ayuda en Europa por parte de la Comisión Europea, el ejecutivo de la UE.
En marzo, la Unión Europea se comprometió a hacer “lo que sea necesario” para reconstruir la capacidad europea de fabricar piezas para instalaciones solares, tras la invasión rusa de Ucrania y la crisis energética que provocó.
El desafío aumentó después de que en agosto se promulgara la Ley de Reducción de la Inflación de Estados Unidos, que proporciona un crédito fiscal del 30% del costo de las fábricas nuevas o modernizadas que construyen componentes de energía renovable.
Además, otorga crédito fiscal por cada componente elegible producido en una fábrica estadounidense y luego vendido.
La preocupación en Europa es que eso alejará inversiones potenciales de su industria renovable nacional.
Dries Acke, director de políticas del organismo industrial SolarPower Europe, dijo que el organismo había escrito a la Comisión Europea instándole a actuar.
En respuesta, la Comisión ha respaldado una Alianza de la Industria Solar de la UE, que se lanzará en diciembre, con el objetivo de lograr más de 320 gigavatios (GW) de capacidad fotovoltaica (PV) recién instalada en el bloque para 2025. Esto se compara con un total instalados de 165 GW al 2021.
"La Alianza determinará la disponibilidad de apoyo financiero, atraerá inversiones privadas y facilitará el diálogo y el establecimiento de contactos entre productores y compradores", dijo la Comisión a Reuters en un correo electrónico.
No especificó ningún monto de financiación.
Berlín también está presionando para crear un marco para la fabricación de energía fotovoltaica en Europa similar a la Alianza de Baterías de la UE, dijo a Reuters el secretario de Estado del Ministerio de Economía, Michael Kellner.
Se considera que la alianza sobre baterías ha desempeñado un papel importante en el desarrollo de una cadena de suministro para la industria europea de vehículos eléctricos.La Comisión dijo que garantizaría que Europa pueda satisfacer hasta el 90% de la demanda de baterías de producción nacional para 2030.
Mientras tanto, se espera que la demanda solar siga creciendo.
Las nuevas instalaciones fotovoltaicas residenciales registradas en Alemania aumentaron un 42% en los primeros siete meses del año, según datos de la asociación de energía solar del país (BSW).
El presidente de la asociación, Carsten Koernig, dijo que esperaba que la demanda siguiera fortaleciéndose durante el resto del año.
Independientemente de la geopolítica, depender de China es problemático ya que los cuellos de botella en el suministro, exacerbados por la política de cero COVID de Beijing, han duplicado los tiempos de espera para la entrega de componentes solares en comparación con el año pasado.
Zolar, proveedor de energía solar residencial con sede en Berlín, dijo que los pedidos han aumentado un 500% interanual desde que comenzó la guerra de Ucrania en febrero, pero que los clientes podrían tener que esperar de seis a nueve meses para instalar un sistema solar.
"Básicamente estamos limitando el número de clientes que aceptamos", dijo Alex Melzer, director ejecutivo de Zolar.
Los actores europeos fuera de Alemania disfrutan de la oportunidad de ayudar a cubrir la demanda reactivando el Valle Solar de Sajonia.
La suiza Meyer Burger inauguró el año pasado plantas de células y módulos solares en Sajonia.
Su director ejecutivo, Gunter Erfurt, dice que la industria todavía necesita un estímulo específico u otro incentivo político si quiere ayudar a Europa a reducir su dependencia de las importaciones.
Sin embargo, es positivo, especialmente desde la llegada el año pasado del nuevo gobierno de Alemania, en el que los políticos verdes ocupan los cruciales ministerios de economía y medio ambiente.
"Las señales para la industria solar en Alemania son mucho, mucho mejores ahora", afirmó.
Hora de publicación: 01-nov-2022